Incluso las series más importantes de Netflix rara vez duran más de un puñado de temporadas, y eso sin tardar ni un segundo en lamentar el volumen desorbitado que se cancela antes de tiempo. Puede que mucha gente ni siquiera se dé cuenta, pero Grace and Frankie sigue reinando como la maestra de la longevidad del servicio de streaming.

Esta pintoresca comedia de situación, una de las pocas originales que ha durado siete temporadas completas, está actualmente empatada con Orange is the New Black en este sentido, pero cuenta con el mayor número de episodios de cualquier exclusiva live-action de Netflix, con 92 entregas antes de llegar a su fin. Por supuesto, en términos de temporadas será superada con el tiempo después de que Élite fuera renovada por una histórica octava temporada, pero por el momento se mantiene a la cabeza de la clase.

Sin embargo, Brooklyn Decker ha revelado en una entrevista con The Messenger que, a pesar de haber sido una de las principales integrantes del reparto durante todo el tiempo que Grace y Frankie estuvo en antena, no ha tenido ni un solo céntimo de remanente por sus aportaciones a la serie, lo que resulta aún más preocupante si se tiene en cuenta que ha sido su única fuente de ingresos como actriz desde su última aparición en un largometraje en Support the Girls, de 2018.

“Es la gran lucha de nuestra industria y un esfuerzo por preservar el oficio de la creatividad y los actores y escritores en este momento. Con todos los streamers, estrenan internacionalmente el mismo día. Así que no consigues ninguna sindicación, no pagas derechos de autor. Ganas lo que ganas por rodar episodios, y no hay dinero que ganar después de haberlo visto así. Esta es la vida de un actor. Puedes estar trabajando un año seguido y luego un periodo de sequía de tres años. Tienes que pensar en el seguro.

En la televisión no hay baja por maternidad, así que la huelga es importantísima. Tuve una experiencia increíble trabajando, pero sin duda no fue lo que habría sido en una cadena. Estos streamers están ganando un montón a costa de los creativos y ya es hora de que esos salarios se paguen y se asignen de forma justa. Nadie pide más de lo que merece. Todo el mundo pide justicia y un salario justo por su trabajo”.

Las regalías han sido una parte clave de las huelgas en curso, y cuando siete temporadas de Netflix TV no te hacen ganar ni un céntimo más a pesar de la popularidad del proyecto en cuestión, es fácil así entender por qué.