Si hay una escena que resume a la perfección lo que Henry Cavill aporta al papel de Geralt de Rivia en The Witcher, esa tiene que ser la escena inicial de la tercera temporada.

Apareciendo de la nada con un golpe de héroe en toda regla, el Lobo Blanco diezma a una banda de enemigos de forma brutal y sangrienta, y la primera palabra que sale de su boca durante la última tanda de episodios del actor es el característico “Hmmm” de Geralt.

Fue una forma estupenda de volver a presentar al personaje principal al público, pero también fue agridulce saber que será Liam Hemsworth quien se ponga en su lugar a partir de la cuarta temporada. Sin embargo, curiosamente, en un reciente vídeo entre bastidores publicado por Netflix Geeked, Cavill reveló una fascinante coincidencia.

Uno de los dobles que murió en el filo de la espada de Geralt en el set inaugural de la tercera temporada también fue uno de los que tuvo la mala suerte de cruzarse con el cazador de monstruos durante su primera secuencia de acción en las calles de Blaviken en la primera temporada.

Aunque el hecho de que los dobles se reciclen y reutilicen a lo largo de varias temporadas de televisión no es una revelación sorprendente, no deja de ser un poco poético.

Cabe preguntarse si el antiguo Superman se puso sentimental después de brutalizar, apalear y, en general, mutilar a muchas de estas personas por última vez en su vida, después de haber pasado tanto tiempo poniéndoles el culo en bandeja de plata durante sus tres temporadas como cabeza visible de The Witcher.