Una exasperada Kate Winslet expone por fin su verdadera opinión sobre las posibilidades de supervivencia de Jack en ‘Titanic’

Debatir si Rose es una mocosa egoísta por dejar que Jack muriera congelado cuando evidentemente había espacio en esa madera a la deriva durante los últimos momentos de Titanic se convirtió rápidamente en una de las eternas preguntas sobre cine que la gente de Internet ha llegado a debatir a lo largo de los años. Al igual que si Han o Greedo dispararon primero en La guerra de las galaxias, qué hay en la caja en Pulp Fiction o si la peonza se derrumba en Inception. La lista es interminable.

Ahora, una de las estrellas de la epopeya de 1997 de James Cameron ha dado su opinión, un par de días después de que el director revelara que supuestamente realizó un estudio científico para determinar la posibilidad de que tanto Jack como Rose sobrevivieran en la balsa improvisada. Kate Winslet intervino en el podcast Happy Sad Confused con su exasperada (y probablemente con razón) opinión:

“No lo sé, maldición”. Esa es la respuesta. No lo sé. Mira, todo lo que puedo decirte es que tengo un conocimiento decente del agua y de cómo se comporta. Si pones dos adultos en un stand-up paddleboard, se vuelve inmediatamente, extremadamente inestable. Eso es seguro. Tengo que ser honesto: en realidad no creo que hubiéramos sobrevivido si los dos nos hubiéramos subido. Creo que habría cabido, pero se habría inclinado y no habría sido una idea sostenible. Así que, lo escuchaste aquí por primera vez. Sí, podría haber cabido en esa puerta. Pero no se habría mantenido a flote. No lo habría hecho”.

Así que ahí lo tenemos: por muy grande que pareciera esa puerta (tan ancha que cabían dos humanos), por desgracia, la gravedad es una bestia despiadada que habría hundido el improvisado dispositivo de flotación bajo la superficie del océano helado, dejando que tanto Jack como Rose murieran de hipotermia. Tal vez Winslet pueda dejar de responder a esta pregunta en las ruedas de prensa, ahora que ha dejado bien claro lo que piensa al respecto.

Mientras tanto, James Cameron sigue exhibiendo su ego durante las giras de Avatar: El Camino del Agua, demostrando que la edad no humilla a los directores que reciben constantemente cientos de millones de dólares para sus presupuestos de producción, y la gente, francamente, lo está superando.