La guerra de ofertas por ‘Tomb Raider’ estalla cuando MGM pierde los derechos cinematográficos

Una de las franquicias de videojuegos más queridas está a punto de volver a subastar sus derechos cinematográficos, ya que Metro-Goldwyn-Mayer ha perdido los derechos cinematográficos de Tomb Raider.

Lara Croft ha sido un icono de los videojuegos desde que apareció por primera vez como una serie de polígonos en la Sega Saturn en 1996, dando lugar a un total de 19 aventuras a lo largo de varias generaciones de videoconsolas. Sin embargo, los intentos de adaptar sus historias al celuloide han sido difíciles, con tres intentos en total.

Angelina Jolie protagonizó la película de 2001 Lara Croft: Tomb Raider y su secuela The Cradle of Life bajo la dirección de Paramount, antes de que Metro-Goldwyn-Mayer se hiciera con los derechos y produjera Tomb Raider de Alicia Vikander en 2018. Ahora, cuatro años después, MGM ha perdido oficialmente los derechos de la franquicia, y ha comenzado una guerra de ofertas por la “it girl” del juego.

MGM tenía una fecha límite de mayo de 2022 para dar luz verde a una secuela de Tomb Raider de Vikander, pero no lo hizo, revirtiendo los derechos de vuelta al editor Square Enix, según un informe de The Wrap. La problemática historia de las adaptaciones cinematográficas de las franquicias de videojuegos ha debilitado la confianza en Hollywood para darles luz verde.

Halo consiguió ser un éxito moderado como episodio original de Paramount Plus, y la serie postapocalíptica Fallout está destinada a debutar en streaming en Amazon Prime. Tomb Raider se inspiró en Indiana Jones, lo que hace difícil creer que haya luchado durante tanto tiempo para conseguir algún éxito cinematográfico.

Los orígenes de la franquicia en el mundo de los videojuegos siguen vigentes, y la trilogía más reciente de juegos de Tomb Raider finalizó en 2018 con el alabado por la crítica Shadow of the Tomb Raider.