‘John Wick: Capítulo 4’ se inspira en gran medida en una bailarina icónica y en un musical clásico

La franquicia John Wick siempre ha sabido tomar el pulso a lo que hace una gran película de acción. Ya sea a través de secuencias sin aliento, un trabajo de cámara increíble o una escenografía estelar, John Wick aúna las virtudes cinematográficas de las viejas epopeyas de artes marciales de Hong Kong con un giro perverso de las películas de superhéroes.

Desde que se abrió paso en los cines en 2014, la historia vengativa de un ex-sicario en el camino de la redención ha tomado al mundo por asalto y ha cambiado para siempre el género. Al igual que los éxitos de taquilla de antaño, éstas se basan más en acrobacias reales que en efectos de posproducción, y parece que no nos cansamos.

Antes de John Wick, las películas de acción eran bastante sencillas: Pega-pega, dispara-dispara, el bueno mata a algunos, el malo mata a otros… y fin. Divertidas de ver, claro, pero formulistas hasta decir basta. Entonces entra en escena el Sr. Wick y empieza a patear culos con mucho estilo, y el resto parece ser historia.

Chad Stahelski, el director de las cuatro películas de John Wick, es al que todos podemos dar las gracias por ese cambio drástico de tono. En una entrevista reciente con IndieWire, Stahelski y otros creativos de la última entrega de la serie hablaron de cómo los musicales clásicos de Hollywood influyeron en su coreografía de lucha en general.

“Todo el mundo se ríe cuando lo digo, pero me encantan los musicales. Bob Fosse es una gran inspiración. Gene Kelly en Singin’ in the Rain. No reinventamos la acción ni nada parecido con John Wick, simplemente gastamos todo nuestro dinero y tiempo en preparar a Keanu (Reeves) para que fuera nuestro Gene Kelly”.

Tomando una escena de Singin’ in the Rain, Stahelski se propuso expresar el carácter a través del movimiento y el lenguaje corporal, contando una historia visual, además de una narrativa. En una época en la que las escenas de lucha se han convertido en algo rutinario, fusionar la danza con las escenas de acción de la película es una genialidad. Francamente, podemos imaginar cuánto tiempo llevó la coreografía.

“Muchos equipos de especialistas entrenan a los miembros del reparto para que golpeen el saco de boxeo, que es una mentalidad de artes marciales. Golpear el saco pesado está muy bien, pero si no puedes recordar tus movimientos, no importa lo fuerte que puedas golpear o patear”.

El montador de John Wick: Capítulo 4, Nathan Orloff, también habló de cómo trabajó con Stahelski para ofrecer un montaje igual de atractivo.

“Rara vez cortaba sobre un puñetazo. Cortaba alrededor del puñetazo, después del golpe en la recuperación, y luego mostraba el comienzo de otra cosa. Quería bailar alrededor de la acción y no formar parte de ella, y por eso Chad y yo nos llevábamos bien”.

En un mundo en el que las cosas pueden parecer tan homogeneizadas, es agradable saber que hay creativos ahí fuera haciendo algo diferente, y respetando el pasado en el proceso. Todo lo que podemos hacer ahora es esperar a John Wick: Capítulo 4, y aferrarnos a la vida.