El universo de terror de Disney se expande con Bambi y Peter Pan, dos películas que prometen ser salvajes.

Disney

ha sido objeto de críticas -con toda justicia, conviene advertir- por su cada vez más monótona línea de producción de remakes live-action, pero quizá esos pecados deban ser perdonados cuando el equipo responsable de Winnie the Pooh: Sangre y Miel se encuentra en medio de algo mucho peor.

Por si no fuera suficiente con convertir a los habitantes del Bosque de los Cien Acres en los sangrientos antagonistas de uno de los largometrajes peor valorados de la historia del cine, el productor Scott Jeffrey ha confirmado a The Hollywood Reporter que está redoblando sus planes de dirigir Bambi: The Reckoning y Peter Pan’s Neverland Nightmare.

“En realidad íbamos a rodar Peter Pan’s Neverland Nightmare, pero el guión no estaba listo. Yo iba a dirigir Bambi, pero cambié a Peter Pan porque es más mi estilo. Estoy retrasando Peter Pan hasta abril, y Bambi empieza a rodarse en enero. Así que estamos preparándonos ahora mismo. Va a ser salvaje”.

Como parece que hay gente que también quiere que exista algo así, el cineasta ha confirmado que se está preparando todo un universo que bordeará la delgada línea que separa el dominio público de la violación de los derechos de autor.

“Va a haber Easter eggs en Winnie the Pooh 2 sobre dos películas que aún no se han anunciado. Sólo un pequeño guiño. Lo mismo en Bambi. Están muy conectadas, pero no en tu cara. Y más adelante, supongo que cuando se nos acaben las ideas, empezarán a encontrarse”.

Puede que los superhéroes se lleven gran parte de la culpa de la llamada “muerte del cine”, pero sería un crimen omitir de la conversación la obsesión por convertir los queridos cuentos infantiles en slashers.