Austin Butler revela la mejor lección que aprendió interpretando a Elvis Presley

Austin Butler nos cuenta las lecciones que aprendió al convertirse en Elvis Presley para la película biográfica de Baz Luhrmann, Elvis.

La dedicación y pasión de Butler por la historia que se cuenta le llevó a pasar tres años inmerso en todo lo relacionado con Elvis, para honrar al icono de una forma que se sintiera auténtica, real y polifacética. Durante la transformación, Butler vio un lado de Presley que los fans no conocieron en vida, algo con lo que los fans de los últimos años están más familiarizados pero que nunca llegarán a comprender en profundidad. Es el lado del estrellato del que no se habla a menudo, un lado más oscuro y desgarrador que ve a algunos de los mejores en el negocio viviendo vidas con más soledad de la que jamás imaginaron.

En una entrevista con Variety, Butler explica cómo comprender al hombre que se esconde detrás de los zapatos de ante azul ha influido profundamente en su vida y le ha dado una nueva perspectiva para continuar su viaje en el candelero.

“Creo que me ha hecho reflexionar sobre a quién pido consejo y a quién tengo cerca. Interpretar a Elvis también me ha hecho pensar en el hecho de que puedes tenerlo todo y aun así sentirte vacío. Puedes hacer realidad todos tus sueños y seguir buscando algo más profundo y sentirte muy solo. Experimentas un montón de amor público y luego vuelves a una habitación silenciosa”.

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Presley fue un icono más grande que la vida en un momento en que sus fans necesitaban un héroe, pero a medida que sabíamos más sobre su vida, era evidente que estaba buscando uno para sí mismo. Lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a lo que le aquejaba, trató de ocultar la soledad y la angustia tras una hermosa voz y una personalidad escénica que cautivaba a todos los que le rodeaban. Presley lo tenía todo, ¿verdad? ¿Qué hombre podía sentir otra cosa que no fuera alegría cuando todos esos lujos le rodeaban?

Para quienes siguieron la carrera de Presley y han continuado fascinados por su talento en los años posteriores a su muerte, es evidente que eran muchos los demonios a los que se enfrentaba en una batalla privada. Intentó ser el héroe que todos necesitaban en su vida, y al final se aprovecharon de él sus más allegados. Es una historia desgarradora de la que Butler aprendió mucho, quizá lo más importante, que “tenerlo todo” no significa que vayas a encontrar la alegría en nada de ello. La vida se compone realmente de las experiencias que nos forman y de aquellos con quienes las compartimos.

Si aún no ha visto la transformación de Butler en Presley, puede verla ahora en Elvis, de Baz Luhrmann.