La secuela de Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft podría no contar con Alicia Vikander

Los videojuegos tienen una ventaja similar a las novelas, pues tienen suficiente tiempo para desarrollar a sus personajes principales y los misterios que envuelven la trama. Aprovechando las posibilidades de generar franquicias, este tipo de entretenimiento suele tener un desarrollo bastante elevado y complejo. Esto provoca que las adaptaciones al cine siempre suenen prometedoras, pero siempre se queden a medio camino. Realmente no se puede hablar de manera unánime de un título que logre romper con la maldición de este tipo de adaptaciones, pero algunos logran un mejor trabajo que otros.

Hace años, cuando Angelina Jolie tomó el rol de Lara Croft para Lara Croft: Tomb Raider  quedó claro que la producción prefirió aprovechar a la actriz como una buena representación física de la heroína, dejando de lado las bondades del videojuego para armar un gran misterio dentro de una trama bien llevada. La nueva adaptación, llamada Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft, prefirió basarse en el reboot del videojuego, pero la lección anterior no llegó a oídos atentos y el producto final termina por tener los mismos problemas que otras películas de este tipo. Ahora, el mejor elemento del reboot podría no ser tomado en cuenta para las posibles secuelas, pues parece que el plan es dejar ir a Alicia Vikander.

En general, Tomb Raider: Las Aventuras de Lara Croft no fue bien recibida por los críticos ni los fans, pero al menos se rescataba el digno trabajo de Vikander, quien entrenó por meses para respetar la apariencia y personalidad del popular personaje. De hecho, muchos consideran que la actuación de la ganadora del Óscar merecía un mejor guión.

Pero como el dinero lo es todo y una franquicia que no genera lo suficiente en el primer fin de semana debe ser revaluada si quiere seguirse explotando, parece que las cosas cambiarán para las siguientes entregas. Según Crazy Days and Nights, fuentes de uno de los estudios aseguran que la secuela no traería de vuelta a la actriz. Es de resaltar que no se especifica cuál estudio, pues la cinta es el resultado de la alianza entre MGM, Warner Bros. y GK Films; además tampoco se aclara si se buscaría un reemplazo o veríamos un nuevo y apresurado reboot. Tampoco se puede olvidar que, técnicamente, una secuela no ha sido aprobada, así que es muy pronto para dar por hecho estos rumores.

Una de las mayores quejas sobre la cinta es que, irónicamente, se siente más como un videojuego, pero sin orden. Las escenas de acción están muy bien presentadas, pero sólo las hila la necesidad de resaltar las habilidades de Lara Croft, en vez de mostrarse naturalmente en el desarrollo de la trama. Además, la recepción en taquilla tampoco ha sido muy buena. Según MovieWeb, la película dirigida por Roar Uthaug sólo ha obtenido US$42 millones en taquilla local (Estados Unidos y Canadá) contra una producción que costó US$94 millones. El fracaso monetario y el hecho de que Vikander está en la mejor y más ocupada etapa de su carrera, disminuye las posibilidades de ver una secuela.