Estrella de “Harry Potter” confiesa que la franquicia le resultaba “asfixiante” a veces

Rupert Grint mantuvo un perfil relativamente bajo tras el final de Harry Potter en 2011. Daniel Radcliffe siguió perfeccionando sus dotes interpretativas en el teatro y en una serie de películas independientes, Emma Watson ascendió al estatus de superestrella y se convirtió en Embajadora de Buena Voluntad de la ONU, pero Grint aceptó una serie de papeles menores y trató de llevar una vida relativamente normal, aunque desde entonces se ha sincerado sobre sus problemas con el alcohol.

Ahora está volviendo a la cima, con papeles aclamados por la crítica en Servant, de M. Night Shyamalan, y Cabinet of Curiosities, de Guillermo del Toro, mientras que su primer papel en la gran pantalla en ocho años está a la vuelta de la esquina, cuando llegue Knock at the Cabin, de Shyamalan, a finales de esta semana.

Ahora, en una entrevista con Bustle, ha reflexionado sobre su etapa como Ron Weasley, y parece que se merecía un tiempo alejado de los reflectores:

“Potter estaba a tope: todo el año [rodando] y el resto del tiempo de promoción. Era sofocante. Quería un descanso, reflexionar sobre todo… Fue una experiencia extracorporal durante un tiempo, pero creo que terminamos en el momento adecuado. Si hubiéramos continuado, podría haber ido cuesta abajo”.

La última vez que Grint pisó el Potterverso fue en Harry Potter 20th Anniversary: Regreso a Hogwarts, pero parece que era reacio a unirse a sus antiguos compañeros de reparto. Cree que no ha pasado suficiente tiempo como para justificar un reencuentro y subraya que no ha visto todas las películas de Harry Potter porque no le gusta verse a sí mismo en la pantalla. Aun así, la experiencia parece positiva:

“[Estar en Harry Potter] fue una experiencia realmente única que sólo nosotros, el grupo principal, conocemos de verdad, así que es agradable verlos. Fue una buena oportunidad para reflexionar sobre todo y decir lo loco que fue. Siempre es agradable echar la vista atrás”.

La reputación del Wizarding World ha recibido algunos golpes importantes en los últimos años debido a la transfobia de J.K. Rowling, y la franquicia de Fantastic Beasts parece que va a llegar a un final abrupto después de que Los secretos de Dumbledore no funcionara como se esperaba. A finales de esta semana, cuando Hogwarts Legacy llegue a consolas y PC, podremos comprobar cómo va la cosa.

En cualquier caso, Grint parece muy contento de dejarlo todo atrás y mirar hacia el futuro. ¿Quién puede culparle?