Jennette McCurdy revela lo que le hizo abandonar su primera sesión de terapia

Jennette McCurdy

no tiene miedo de ponerlo todo sobre la mesa, que es exactamente lo que ha hecho en sus nuevas memorias, I’m Glad My Mom Died. McCurdy se unió hoy a los presentadores de The View para charlar sobre el crecimiento, la terapia y un complicado viaje de curación.

McCurdy se metió en el mundo de la actuación infantil con sólo 7 años, por insistencia de su madre, lo que relata en sus memorias. También relata los años que pasó soportando lo que luego se dio cuenta que era un abuso por parte de su madre. Aunque no siempre fueron físicos, la madre de McCurdy tuvo tendencias abusivas durante toda su vida, algo de lo que su famosa hija no se dio cuenta hasta que experimentó varias formas de terapia años después.

McCurdy señala que tenía a su madre en un pedestal, así que cuando empezó la terapia, un comentario del terapeuta la hizo levantarse y salir rápidamente de la habitación. Irónicamente, esa misma afirmación la llevaría a recuperarse y sanar.

“Los primeros terapeutas que vi, mientras compartía anécdotas de mi experiencia con mi madre, llegaron a un punto en el que dijeron: ‘Sabes lo que estás describiendo como abuso’. Lo dejé, dejé la terapia. No podía tolerar la idea… de que mi madre fuera abusiva, porque eso significaría bajarla de ese pedestal y replantear toda mi existencia que giraba en torno a esta idea de que mi madre sabe más. [La idea de que] Lo que mi madre quiere para mí es mejor que lo que yo quiero para mí porque ella sabe más, y yo no soy nada sin ella”.

Por supuesto, McCurdy volvería a la terapia y trabajaría esa idea, pero le llevó algún tiempo. Como explica, no estaba preparada ni dispuesta a aceptar esas palabras cuando las escuchó por primera vez.

“Así que intentar desentrañar eso era algo que no estaba dispuesta a hacer inicialmente. Y me costó un tiempo ser capaz de decir sabes qué, voy a llegar ahí de nuevo. Voy a afrontar que ella era abusiva. Voy a enfrentarme a lo que sea que eso suponga”.

La voluntad de McCurdy de permitir que alguien que mira desde fuera la ayude a navegar por una infancia que estuvo llena de algunos de los altibajos más extremos es parte de la razón por la que es capaz de hablar de ello hoy. Después de todo, el título de sus memorias es Me alegro de que mi madre muriera. Sabe que es polarizante y que puede ser un shock, pero era la única manera de dar sentido a todo lo que había vivido y ser honesta consigo misma.