Ezra Miller acusado de golpear y ofrecer drogas a una menor de edad

Los padres de una joven de 18 años piden a un tribunal que intervenga y emita una orden de protección contra el actor de The Flash y Fantastic Beasts: Los crímenes de Grindelwald.

La mujer, Tokata Iron Eyes, conoció a Miller en 2016 cuando el actor tenía 23 años y ella 12, según documentos judiciales obtenidos por TMZ. Miller estaba de visita en la reserva de Standing Rock en Dakota del Norte y los padres dicen que el encuentro se convirtió en una amistad peligrosa.

Después de conocerse, Miller llevó a Iron Eyes a Londres en 2017 para visitar el set de Fantastic Beasts. Los padres dicen que Miller, que tenía 25 años en ese momento, le proporcionó a la niña de entonces 14 años drogas como LSD, marihuana y alcohol. También afirman que Miller interfirió posteriormente en la escolarización de Iron Eyes hasta el punto de que ésta abandonó un colegio privado de Massachusetts en 2021.

Los padres afirman que viajaron a la casa de Miller en enero para llevar a su hija a casa, y se dieron cuenta de que no tenía necesidades básicas como la tarjeta bancaria, las llaves del coche o el permiso de conducir. Los padres también dicen que tenía moratones en el cuerpo. Sin embargo, una vez que Iron Eyes regresó a casa, se escapó rápidamente para estar con Miller, y la pareja viajó junta a Los Ángeles, Vermont y Hawai.

Hawái es significativo porque Miller fue noticia cuando supuestamente atacó a los clientes de un bar en ese estado. Una pareja solicitó y obtuvo una orden de alejamiento contra la estrella, que posteriormente fue retirada.

“Ezra utiliza la violencia, la intimidación, la amenaza de violencia, el miedo, la paranoia, los delirios y las drogas para dominar a la joven adolescente Tokata“, dicen los documentos presentados por los padres de Iron Eyes.

Además, dicen que Miller decidió que Iron Eyes era transgénero no binario, mientras que ella se identificaba anteriormente como “no binaria, queer, gay”.

Iron Eyes tomó las redes sociales, que TMZ capturó, para refutar las afirmaciones de sus padres, diciendo que Miller es un “camarada” en su vida y que recientemente comenzó a ver a un terapeuta.

“Este episodio de traición y toxicidad flagrantes con el que mis padres y otros han decidido castigarme ha sido desesperadamente embarazoso y ha alterado mi vida de forma traumática. Las relaciones en mi vida se han visto gravemente afectadas, algunas de forma perjudicial. Este comportamiento es inaceptable y debe ser denunciado”.

También afirmó que no necesitaba ayuda de sus padres y que era objeto de “manipulación psicológica” no por parte de Miller, sino de sus propios padres.

“No soy de ninguna manera, ni bajo ninguna circunstancia he sido durante mi corta vida adulta, necesitada de una tutela. Mi padre y sus alegaciones no tienen ningún peso y son francamente transfóbicas y se basan en la noción de que soy de alguna manera incapaz de tener un pensamiento coherente o de oponerme a las opiniones de mis propios allegados preocupados por mi bienestar. Ahora soy consciente de la gravedad de la manipulación emocional y psicológica que me hicieron soportar mientras estaba en casa de mis padres”.

La vista del requerimiento judicial está fijada para el mes que viene, mientras que Miller no se ha pronunciado públicamente sobre el incidente por el momento.