Con la popularidad de Star Wars en juego, el CEO de Disney, Bob Iger, ha reconocido el error de la empresa al sobresaturar el mercado con la franquicia. Ahora, para evitar malentendidos, el ejecutivo decidió aclarar su postura que lejos está de reflejar una decepción con estas películas.

En una conversación reciente con BBC Radio, Bob Iger precisó que sus observaciones en nada recelan sobre la calidad de las últimas producciones de Lucasfilm:

He dicho públicamente que creo que hicimos y lanzamos demasiadas películas de Star Wars en un corto período de tiempo. No he dicho que fueron decepcionantes de ninguna manera. No he dicho que estoy decepcionado por su desempeño. Simplemente creo que hay algo muy especial en una película de Star Wars, y menos es más. 

Con estas nuevas declaraciones, la postura del CEO parece asumir que la experiencia de un universo fílmico, tan longevo e icónico, aún debe sustentarse en la expectativa. Con las trilogías originales de la Guerra de la galaxias, la espera entre las primeras, segundas y terceras partes abarcó siempre tres años. Entre 2015 (año en que estrenó El despertar de la fuerza) y el próximo diciembre, hablamos de cuatro años donde no sólo cupo la última trilogía de la saga Skywalker sino también dos spinoffs: Rogue One y Solo.

Un descanso dado a la pantalla grande parece necesario para los relatos sobre espadas láser y batallas espaciales. La fórmula MCU de lanzar anualmente entres dos y tres producciones no sincroniza con las condiciones de Star Wars. Dicho esto, la plataforma streaming Disney+ promete fomentar constancia, gracias a series como la de Obi-Wan Kenobi. Esto, sin atentar contra el suspenso debido a aquellos productos que sí ameritan llegar al cine cada cierto periodo de tiempo.