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Josh Peck dice que algunas personas pensaban que era “más gracioso cuando estaba gordo”

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Josh Peck se sentó esta semana a conversar con el programa Today para hablar de su nuevo libro de memorias, Happy People Are Annoying. El título, explicó, se debe al hecho de que, cuando era joven, pensaba que la felicidad era algo reservado a una “clase de élite” de personas como los mariscales de campo y los atractivos o ricos.

“Así que al escribir este libro, se trataba de aceptar esa idea, y lo que tuve que afrontar para encontrar mi propia versión de la felicidad y definirla por mí mismo”, dijo la ex estrella infantil a Joe Fryer de la NBC.

Durante la charla, Peck también habló de sus inicios en la comedia y el mundo del espectáculo. Con sólo 10 años, ya hacía monólogos en clubes de comedia, lo que, según él, era un “mecanismo de defensa” por su sobrepeso de niño.

“No iba a ser en las ligas menores, mi capacidad cardiovascular no estaba a la altura a esa edad, me gustaban mucho los Fruit Roll-Ups, los Gushers… Me gustaban mucho los snacks de fruta, no voy a mentir”, bromeó el actor, que ahora tiene 35 años.

“Pero sí, encontré mi primer agente en la revista Backstage cuando tenía nueve años, no sé cómo llegó a mis manos”, continuó. “Fui a entrevistarme con él y me dijo: ‘Consigo a jóvenes monologuistas tiempo en clubes de fiar en Nueva York -Gotham, Carolines- si puedes montar un acto, te subo’. Y una semana después estaba actuando en el club de comedia Carolines. Y, a partir de entonces, me colaba en las traseras de la mayoría de los clubes de comedia de Nueva York para que no perdieran la licencia de alcohol”.

“Creo que mi comedia surgió como un mecanismo de defensa por haber crecido con sobrepeso, y básicamente sentí, real o imaginariamente, que entraba en la mayoría de las habitaciones a esa edad y con mi peso en desventaja, que la gente hacía un juicio rápido sobre mí de que era, ya sabes, perezoso o que me faltaba fuerza de voluntad o algo así”, compartió Peck. “Y que me correspondía no destacar necesariamente; sólo quería estar al mismo nivel que los demás”.

A pesar de sus inseguridades, Peck dio su gran salto a la actuación en la serie de comedia de sketches de Nickelodeon All That en 2000, y más tarde en The Amanda Show, protagonizada por la entonces estrella adolescente Amanda Bynes, antes de conseguir un papel principal en Drake & Josh en 2004. Peck recuerda cómo cambió la percepción del público cuando finalmente bajó de peso entre las temporadas tres y cuatro.

“Imagino que debe haber sido extraño, para la gente, haber visto a esta persona de la que se enamoraron -con este aspecto y este tamaño- y de repente, hay este tipo de cambio masivo”, explicó. “Cuando perdí peso, hubo un pequeño contingente que pensó: ‘Oh, eras más divertido cuando estabas gordo o quitaste a este tipo que nos encantaba y no estamos tan seguros de querer a este nuevo tipo’. Así que fue muy extraño navegar por eso”.

Independientemente de su tamaño, Peck ha conseguido hacer la transición de estrella infantil a actor adulto. Además de un papel recurrente en Cómo conocí a vuestro padre, de Hulu, Peck está rodando actualmente el próximo thriller biográfico de Christopher Nolan, Oppenheimer.

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