El guionista de ‘Cocaine Bear’ quiere un crossover con ‘Avatar’

Cocaína, osos y Na’vi… ¡Dios mío! Así es, si el guionista de Cocaine Bear tiene algo que ver con ello, puede que en un futuro no muy lejano nos amontonemos en los cines para ver una secuela de su próxima superproducción, en la que nuestro oso negro drogado emprende un viaje por el hermoso escenario de Pandora.

En una reciente charla con MovieWeb, Jimmy Warden habló sobre las ideas no sólo de una secuela, sino de todo un universo nacido de los no tan humildes comienzos de Cocaine Bear. No todos los días un animal salvaje ingiere 18 kilos de cocaína, y las posibilidades que se abren son infinitas, sobre todo en un mundo tan vasto e inexplorado como Pandora.

Por supuesto, tienen que darse algunos pasos antes de que la película pueda tener lugar, como la idea de salir de los sueños de Warden y entrar en un reino real de la existencia… ¡pero estamos aquí para ello!

“El gran James Cameron vino a mí en un sueño y me grabó “Cocaine Bear$” en el pecho con un cuchillo, así que supongo que tenemos que hacer más. James Cameron lo dijo. Y definitivamente hay algunas ideas que tengo flotando por ahí…. James, si estás leyendo esto, tengo un gran lanzamiento para Cocaine Bear en Pandora”.

Soy el oso que comió cocaína. Esta es mi historia.

I'm the bear who ate cocaine. This is my story. pic.twitter.com/txBSiUl5hL

— Cocaine Bear (@cocainebear) November 30, 2022

Imagínatelo, el Oso Cocaína con los Na’vi, deambulando por ahí y haciéndose amigo de Jake Sully, Neytiri y Kiri. Con las banshees volando por ahí y los Tulkun nadando en las aguas, nuestro recién coronado mejor oso podría sumergirse en un mundo lleno de aventuras. Tal vez el ambiente general de Pandora le cambiaría las cosas, le ayudaría a pasar página; en lugar de una racha asesina con su próxima dosis de cocaína, podría ser completamente zen y aprender a volar en su lugar. Si soñamos con las posibilidades de un oso cocainómano, vamos a asegurarnos de soñar a lo grande.

Ya se trate de un oso en Pandora o de otro animal, como un tiburón cocainómano, hay varias vías narrativas en las que los animales y la cocaína podrían unirse para dar lugar a una idea cinematográfica de éxito. Sólo tenemos que reunir a las mentes adecuadas para hacerlas realidad.

Brindemos por un sinfín de posibilidades para la locura inducida por las drogas de animales de todo el planeta y de otros ámbitos cinematográficos.